La ruta empieza con una subida de un pequeño y bonito puerto de montaña, el Puerto de La Lancha de 1.485 metros. Se trata de una carretera que busca la unión con una carretera secundaria que conecta El Espinar, cerca del Puerto de los Leones, con la ciudad de Ávila. El asfalto es bueno y el transito de coches es escaso, es una carretera perfecta para el ciclismo de carretera.
Poco a poco vamos ganando metros y cruzamos un pequeño bosque de robles. Tras unas curvas de herradura el bosque da paso una vegetación baja de matorrales de alta montaña. Es notable la dureza de los inviernos en esta zona, la carretera va acompañada todo el rato por palos guía, blancos y rojos, para cuando las nieves cubren la carretera y poder seguirla.
En las cretas se divisa una hilara de aerogeneradores en pleno funcionamiento, generando un ruido peculiar incrementándose a medida que nos acercamos.
En el cielo un grupo de unos siete u ocho buitres leonados vuelan en circulo. Una bonita estampa nos inspira la subida.
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